miércoles, 13 de septiembre de 2017

Labios partidos





Tienes los labios partidos
De tanto hablar inconcluso,
De morderlos cuando quieres decir mi nombre,
Pero no te atreves,
Como una caja musical rota
Que suena para ella misma, egoísta,
Nebulosa.

Tienes los labios partidos
De tantos besos,
Porque cada beso es una mentira
Para llegar a cuerpo ajeno,
Para sentirte acogida,
Tatuada con el sabor equivocado,
Envenenada por quien te hizo callar.

Lo sabes, las piedras no laten,
El cielo de otoño es una primavera falsa,
Los labios partidos son labios desnudos, manchados,
Mordidos y livianos
Como una hoja
Cuando se deja llevar por el viento
Y encuentra su verdad lejos de mí.

Tus labios están partidos.
Siguen amaneciendo con sed de sangre,
Sed de aquella parecida a la tuya,
Sed de aquellos que derramaron tu sangre,
Y se fueron,
Como las estrellas cuando dejan su estela
Para seguir su rastro. 

Tus labios están partidos.
Amanecen sin sed de mi sangre.
Amanecen sin mi cuerpo, porque tú exhumaste mi razón de tu piel,
Porque hablaste de la suerte y de los consuelos
Sin saber que la amnesia no borra las cicatrices,
Sin saber si de las cenizas se hacen los caminos.

Tus labios están partidos de antes,
Porque no puedes huir de lo que eres
Ni de cómo te han hecho.
Nadie más puede remecer tu cuerpo,
Porque sólo se hace una vez,
Porque sólo se está completo una vez.
Porque al romper, nada vuelve a ser igual.

Tus labios están partidos,
Y yo no sé hablar de amor contigo,
Aunque suene injusto, no somos equidistantes.
Tus labios partidos me hablan,
Pero mi voz tiene una sombra
Y no la puedes ver,
Y no la quieres ver.


Luz Apagada



Apagaste tu luz por un capricho,
Como una luciérnaga que quiso dormir en la noche
Con un desconocido.